hace como una hora estaba calentando un pan con queso en el hervidor (sí, el microondas está malo y la necesidad es más fuerte), cuando me puse a pensar en lo genial que sería poder probar todo sin miedo a romper nada. Como un laboratorio de locos donde puedes mezclar cosas y si explota, no importa porque al rato desaparece todo. ¡Boom! 🎉💥
Se han fijado que probar cambios directamente en staging —o peor, en producción— es como jugar Jenga borracho. Tarde o temprano algo se cae 😵. Por eso, la idea de tener entornos efímeros automáticos para cada cambio es una bendición tecnológica.
Funciona así:
➜ Haces un pull request.
➜ El pipeline detecta el cambio y despliega un entorno completito: infra, app, datos de prueba.
➜ Testean todo, validan, hacen el QA con lujito.
➜ Y cuando aprueban o cierran el PR... puf, se destruye el entorno como castillo de arena después de la marea 🌊🏰.
Lo hermoso de esto:
✔️ Reduces el riesgo de errores que solo aparecen en producción (porque sí, siempre hay uno).
✔️ No contaminas staging ni acumulas basura técnica.
✔️ Ahorras plata, porque no estás manteniendo ambientes eternos para pruebas fugaces.
Y lo mejor: puedes jugar, experimentar, validar hipótesis absurdas (“¿qué pasa si borro esta VPC?”), sin dejar la escoba real.
Bueno eso sería todo, nos vemos cuando logre que el pan con queso no sepa a hervidor. ¡Prueben, rompan y destruyan con gracia! 🧠🔧🕳️
Comentarios
Publicar un comentario